"Es difícil tener una competición donde estén todos los principales judokas del mundo, el Masters es uno de ellos. Entonces, incluso si falta uno u otro, será una buena prueba para los Juegos Olímpicos. Estoy lista para enfrentarme a las más fuertes y ponerme a prueba ". Es con este convencimiento que la subcampeona del mundo de menos de 70 kg, Bárbara Timo, de 29 años, está en Doha, donde a partir de hoy se disputa la etapa más exclusiva del Circuito: reservada a los 36 mejores judokas del Ranking Mundial y en el que Portugal tenía nueve atletas en esta posición, pero dos no han asististido por lesión.
En el caso de Bárbara (29 años), 13º en el ranking, esta es la segunda presencia y no olvida cómo había ido a la primera, en Quingdao-2019. Momento en el que junto a Rochele Nunes (+78 kg), empezó a luchar por Portugal tras haber adquirido la naturalización. "Había intentado tantas veces estar entre las primeras, pero siempre estaba cerca. No podía. El ambiente de estar entre los mejores del mundo incluso me asustó un poco”, recuerda.
"Ya no. Se convirtió en nuestra realidad. Lo acepto y digo: "¡Vamos!" La primera vez siempre es nueva, pero en este momento siento que estoy más consciente y feliz. Es importante empezar el año con una gran competición".
Para Rochele, de 31 años, y también representante del Benfica, será la tercera experiencia en un Masters. El primero lo cumplió aún defendiendo los colores de Brasil. Actualmente en la undécima posición del ranking y por tanto también en lugar de la clasificación olímpica, el evento de Qatar es una “gran oportunidad” para reforzar la visa para Tokio.
"Conseguir una medalla en Doha sería importante porque necesito renovar algunos de mis resultados. Ya llené prácticamente todas las columnas [del ranking para la clasificación olímpica], pero en algunas necesito canjear por puntuaciones mayores. El Masters me los puede dar".
FUENTE: A Bola/Miguel Candeias
FOTOS: A Bola