Sobresaliente la actuación firmada por los judokas españoles clasificados para el Master Mundial que se realizó el fin de semana en San Petersburgo (Rusia). Los madrileños Fran Garrigós (-60 Kg) y Niko Sherazadishvili (-90 Kg) ambos entrenados por el Maestro Quino Ruiz, se colgaban sendas medallas; una de plata y una de bronce.

Y era precisamente Garrigós el primero en agenciarse una medalla el sábado, en este caso la plateada después de una actuación casi perfecta. El joven madrileño comenzó su senda hacia el subtítulo con victoria ante el francés Revol (27º del Ranking Mundial) por Ippón a través de un excelente trabajo de suelo.

En los cuartos de final un wazari de Sutemi waza ante el local Yashuev (21º del Ranking Mundial) colocaba al judoka de Brunete en la semifinal. En dicha instancia  derrotó al uzbeko Lutfillaev (15º de la lista universal y con dos medallas en Grand Slam y una en Grand Prix este año) de una rápida continuidad al Ne waza en el punto de oro, vengándose de la derrota que había sufrido anteriormente a manos del asiático en el Grand Slam de Abu Dhabi en octubre.

Todo quedaba listo para la disputa del título ante el nipón Nagayama (2º del Ranking Mundial). En un combate en el que ninguno de los dos se puso en peligro, una explosiva entrada de Ippón seoi nage del japonés dictó la victoria para el mismo por Ippón y la medalla de plata para Garrigós.

Este metal de Fran constituye la primera conseguida por él en un Master Mundial, así como lo catapulta a finalizar este 2017 en la posición Nº3 del Ranking Mundial. Una vez más el discípulo de Quino demuestra que se encuentra en la actualidad entre lo que más vale y brilla del mundo en los menos de 60 Kg y que constituye una de las principales cartas del triunfo del equipo masculino español.

Por su parte el jovencito Niko Sherazadishvili (-90 Kg), libró la 1º ronda en su condición de cabeza de serie. mientras que en los cuartos de final derrotó al azerbaiyano Mammadali (11º del Ranking Mundial) de Ippón en el punto de oro a través de un rapidísimo contraataque. 

En semifinal enfrentó al pontentísimo georgiano Gviniashvili (10º en el Ranking Mundial, Bicampeón Mundial Junior y 5 veces Campeón de Europa en diversas categorías) en lo que constituyó la reedición del la final del Grand Slam de Abu Dhabi en la cual Niko lo venció de forma brillante. Sin embargo esta vez el poderío físico y la agresividad de su coterráneo lo derrotó por tres sanciones.

A pesar de esto el ánimo de Niko no decayó y salió a por todas en el bronce contra el serbio Kukolj (Nº 1 del Ranking Mundial) y en un trepidante encuentro, el de Brunete venció por 3 wazaris a 2, llevándose así la presea de bronce para casa. Esta metal bronceado supone también el primero de Niko a este nivel, acabar el año también como su compañero Garrigós: en el TOP-3 Mundial y confirma que hace mucho dejó de ser una promesa para convertirse en una palpable realidad.

Y una vez más nos resulta imposible referirnos a los éxitos de estos dos judokas, sin hablar de la extraordinaria labor que continua realizando su Maestro Quino Ruiz. Somos muchos en el judo español los que hemos tenido la suerte de gozar su hospitalidad. Todo sabemos en qué condiciones trabajan en Brunete, lo que les falta materialmente y en cuestiones de espacio, pero sí algo les sobra es espíritu combativo y nunca darse por vencidos.

Un gran club, con un excelente Maestro a la cabeza que lucha por lo suyos, los guía y que hace que sigan creciendo en todos los sentidos. Eso permite que estos dos judokas que luchan a su imagen y semejanza en esfuerzo y dedicación sigan regalando alegrías al judo de España. Enhorabuena para Fran, Niko, el Maestro Quino y el Judo Club Brunete.

España con solo dos competidores finaliza así este Master Mundial con el subtítulo de Fran y el bronce de Niko, consiguiendo un destacado 9º puesto en la clasificación general, mientras que en el sexo masculino quedó ubicado en la el 6º plaza. Para el año 2018 este trío seguro que dará y mucho que hablar…

FOTOS/VÍDEO: IJF/HectorJudoyuko